jueves, 29 de marzo de 2012

FIN DE LA PARTIDA

Me enfrenté a la muerte cara a cara. Fue un duro golpe pero lo asumí con resignación. Por mi mente pasaron todos aquellos años en los que me crucé con gente maravillosa: el gran jefe indio, el elefante volador, aquella bailarina tan guapa y el enano saltarín. También recordé mis dias en la cárcel y en alguna que otra posada de dudosa reputación. Pero ahora, la muerte se ha cruzado en mi camino y no tengo más remedio que volver a la casilla de salida.

sábado, 24 de marzo de 2012

PERDIDO

Iba buscando agua pero me encontré con aquella flor. Después de dos días perdido en el desierto, sonreí por primera vez.

martes, 20 de marzo de 2012

MAGDALENA

Al verla así, llorando, la sumergió rápidamente en su tazón de leche.

viernes, 16 de marzo de 2012

ILUSIONES



La magia que había entre nosotros dos desapareció cuando aquel hombre chasqueó los dedos.

domingo, 11 de marzo de 2012

MI HOMBRE



“Nunca está cuando lo necesito. Desaparece como por arte de magia cuando me doy la vuelta, y ¿para qué?, para irse al bar con sus amigos a beber cerveza. Luego en verano a la playa noooo!!!, porque se me nota un poco la barriga cervecera y mejor nos vamos a la montaña que se está más agustito y hay que ir tapados hasta el cuello. Manda narices. Y encima hoy el despertador que no ha sonado, son ya las 11 de la mañana y tengo que hacer la compra. ¿Dónde estará la dichosa lista? La deje encima de la mesa. Está claro, me he levantado con el pie izquierdo. Y encima este hombre se ha llevado el coche. Luego olerá a todo menos a limpio. Humo, barro y los pelos del perro. ¡Qué poco me gustan a mi los animales! Y tengo en casa dos: uno con cuatro patas y otro con dos. Por dios, donde estará este hombre…. Menos mal, ya llega. A estas horas no se podrá ni andar por el supermercado…Prepárate Pablo…”

- Alba, cariño. Como estabas tan bien durmiendo, he cogido el coche y la lista que había encima de la mesa y he ido al super. Aquí esta la compra.

jueves, 1 de marzo de 2012

NO ENTIENDO



A veces a Jorge se le olvida sacar la basura, y su padre le regaña. Lo que nunca se le olvida es dar un beso a su madre antes de irse a dormir. Ella lo mira sonriendo y le acaricia la mejilla. No dice nada. Por más que su padre se lo explica, Jorge no puede entender cómo, poco a poco, su madre se ha ido olvidando del "niño de sus ojos".