El traqueteo del tren me avisa de que ya estamos llegando. Me emociono al mirar por la ventana, nada ha cambiado desde hace quince años. Y allí está mi abuelo, con su gorra, la bandera y el silbato, como hace quince años.
*Esta fue mi propuesta para el concurso de RENFE
Está muy bien Marialuisa, ese abuelo incorrupto.
ResponderEliminarUn saludo y suerte para el concurso.
MI abuelo fue jefe de estación aunq yo no llegué a conocerlo seguro q era como el abuelo de tu relato
ResponderEliminarBesos Pilo
a mí me gusta, pero ahora te hago una pregunta: si fue para el el concurso de RENFE no te parece que el hecho de pulirlo hubiera quedado mejor? no está mal, pero como ellos deben ser exigentes por eso te lo pregunto! porque repetís dos veces esto de los quince años, está bien por un lado pero por otro me pregunto si era necesario... bueno, no sé, vos sos escritora inteligente, yo solo te aporto el detalle, la lupa, digamos!
ResponderEliminarun fuerte abrazo, querida!
... ¿se ha despertado del sueño tu viajera con el traqueteo? ¿o sigue soñando con que llega a la estación donde hace 15 años despidió a su abuelo? La ternura de las viejas estaciones se ha perdido. Nos quedan estos relatos para recordarla. Un beso MLuisa.
ResponderEliminarNoe: Repetir lo de los quince años, no se, me gusta recalcar, no es por otra cosa :)
ResponderEliminargracias a todas ;)