Hacía calor en pleno mes de Agosto y se metió en la fuente para refrescarse. Era de noche y había luna llena. Contempló su reflejo en el agua y le pareció preciosa. Aquello era un lujo que no sabía cuando volvería a repetirse: Él, su fuente y su luna. Solos los tres. Se vistió, volvió a sus cartones y se durmió mirando su cara.
Criptografía
Hace 4 días
solo puedo decirte que esto es muy bello, y que sentí como si hubieras pintado...
ResponderEliminarbesote!
Precioso, María Luisa.
ResponderEliminartriste y precioso
ResponderEliminarSaludillos
Afortunadamente hay cosas que siguen siendo gratis: la luna, un reflejo, un modo de mirar y... soñar despierto o justo antes de dormirse.
ResponderEliminarUn beso.
Las cosas mas sencillas son las q nos deberian hacer mas felices y la mayoria de veces las olvidamos..Muy bueno como siempre
ResponderEliminarBesos Pilo
Pequeños momentos mágicos en una vida dura, no? Bellísimo, María Luisa.
ResponderEliminarUna bella historia de amor ...
ResponderEliminarBesos de lunes.
Siempre acaba la cosa en el trío...
ResponderEliminarBlogsaludos
Hasta la vida más miserable posee momentos románticos y bellos.
ResponderEliminarPreciosa historia.
Saludos.
La Luna es la Musa de muchos poetas y pintores...
ResponderEliminar.. de letras... como tu :)
Un beso amiga
Para que más.
ResponderEliminarPrecioso, marialuisa